http://microcapilarhairclinic.es/

El picor del cuero cabelludo tras un injerto capilar es uno de los efectos postoperatorios más incómodos en todos los pacientes. Aunque es una reacción natural y esperada, debe observarse para prevenir posibles efectos adversos. Veamos qué es, por qué se produce y cómo reducir el picor en las zonas intervenidas en un injerto capilar.

¿Por qué siento picor en la zona del injerto?

Es muy importante comprender que un injerto capilar es un procedimiento quirúrgico que afecta las diferentes capas de la piel. En el proceso de crear el espacio para las nuevas unidades foliculares, se debe producir una herida operatoria en la piel.

Lo mismo ocurre en la zona donante en la que el cirujano crea un desbalance del equilibrio tisular al extraer el folículo piloso. Estas heridas operatorias inician un proceso cicatrizal en la piel en el que el picor es una reacción esperada.

El picor se produce por diferentes causas que se asocian a reacciones del tejido ante agentes internos y externos. Sin embargo, el picor de una cicatriz se debe al proceso de recuperación de las terminaciones nerviosas.

En el intraoperatorio se produce un corte de las terminaciones nerviosas de la piel y de las células que conforman el tejido. De manera natural e inmediata, el organismo inicia un proceso de recuperación del nuevo tejido.

En este proceso, se libera una hormona llamada histamina que produce una dilatación de los vasos sanguíneos y aumenta la comunicación nerviosa. Además, el sistema inmune aumenta la producción de unas células llamadas mastocitos que producen una inflamación de los tejidos circundantes.

Todas estas reacciones naturales crean una mayor actividad de los receptores de la piel, lo que puede traducirse en picor. Esta sensación es normal en todos los procesos de cicatrización, incluyendo por supuesto el postoperatorio de un injerto capilar.

¿Es normal sentir picor en las zonas donante y receptora a la vez?

El picor, aunque es una sensación incómoda y que puede resultar exasperante, es una buena señal desde el punto de vista médico. Para nosotros, los especialistas de Microcapilar Hair Clinic, el picor es una señal de un buen funcionamiento del sistema inmune y de respuesta orgánica.

La sensación de picor en la zona cicatricial es un símbolo de una buena respuesta del sistema nervioso ante una ruptura de su armonía. Cuando creamos heridas intraoperatorias para extraer e injertar unidades foliculares rompemos el equilibrio natural de la piel.

Por consecuencia, el organismo reacciona generando los elementos químicos necesarios para restablecer su funcionamiento natural. Sin embargo, es importante saber que el picor, al igual que el dolor y la inflamación, pueden ser señales de alerta orgánicas.

El picor puede ser una señal que alerta sobre un proceso infeccioso o de reacciones alérgicas en la zona cicatricial. Esto hace que no subestimemos las sensaciones de picor en el cuero cabelludo y analicemos con detenimiento su evolución postoperatoria.

¿Qué puede pasar si el picor no cesa?

Como hemos visto, el picor puede ser un síntoma de una recuperación cicatricial esperada y sana. Pero, en los casos de un picor exagerado, incesante y que no disminuye con el tiempo, podemos estar en presencia de elementos adversos. 

Un picor incremental y crónico en las heridas postoperatorias puede ser un síntoma de procesos infecciosos e inflamatorios que deben atenderse. Por otro lado, el picor acompañado de pústulas, enrojecimientos o inflamación puede alertar al especialista. 

Por ende, la consulta de seguimiento es fundamental para prevenir los efectos de infecciones o trastornos del tejido. Las reacciones autoinmunes al nuevo folículo pueden reflejarse en picor, enrojecimiento e inflamación. Esto debe determinarse en la consulta médica con diferentes análisis técnicos especializados.

¿Qué pasa si me rasco la cabeza frecuentemente?

De forma prácticamente involuntaria, los pacientes tienden a rascarse con frecuencia y vigor la zona injertada. De hecho, es un axioma casi matemático que a mayor sensación de picor el rascado sea más profundo y vigoroso en búsqueda de alivio.

En un círculo vicioso perjudicial, a medida que el organismo siente mayor alivio con la acción del rascado, el picor puede volverse incremental. Lo que sucede con esto es que podemos lesionar el tejido y afectar la estabilidad de los folículos injertados y comprometer el éxito del tratamiento.

Asimismo, debemos saber que la zona debajo de las uñas es el espacio de mayor acumulación bacteriana del cuerpo. La suciedad y patógenos presentes en las manos se transfieren a la zona cicatrizal aumentando el riesgo de procesos infecciosos agudos.

Aplicar soluciones alcoholadas, astringentes y otras lociones tópicas suele producir alivios temporales del picor. No obstante, estos agentes químicos agresivos pueden tener efectos adversos en la cicatrización y recuperación de la piel. 

Nuestras recomendaciones para reducir el picor del cuero cabelludo tras un injerto capilar

Antes de aplicar remedios caseros y maniobras que supongan riesgos a la piel, lo mejor es seguir estas indicaciones:

  • No rascar la zona. Aunque es muy difícil no obedecer los deseos corporales de rascar la zona con vigor, hacerlo puede suponer mayores lesiones en el tejido.
  • No aplicar ninguna solución, producto o medicamento que no sea prescrito por el especialista.
  • Mantener la higiene e hidratación de la zona de acuerdo a la indicación médica.
  • No exponer la zona al sol y no usar gorros o tejidos que compriman la zona.

     

Si el picor es muy intenso, continuo o incesante, el especialista puede indicar algún medicamento antihistamínico para reducir el disconfort. Pero, es fundamental asistir a las consultas de control para comprobar que el picor no sea una señal de alerta de lesiones o reacciones adversas. Consultar con el especialista de Microcapilar Hair Clinic es fundamental para garantizar el éxito del tratamiento y cuidar de la salud capilar. 

Otros artículos del blog que podrían interesarte